Gracias...

Siempre he jugado con mis amigos, éramos un grupo numerosos.
Todos los días después de clases, nos reuníamos. Que bonitos días y los adultos Vivian en armonía.

Jugábamos a los diversos juegos que cualquier niño pudiese imaginar. No he dejado de soñar esos días, que duro es la vida.
Que duro son estos días y los que vienen, y todavía sigo siendo un niño con ansias de seguir jugando.

Pero ya no puedo.
Abecés pienso si fui un niño afortunado, refiriéndose a mis amigos que ya no están.

Ellos.

Gracias a la bomba que dejo un soldado.

Gracias al bombardeo que le hicieron a mi ciudad.

No se porque!

Lo que si se, es que mis amigo han muerto. El único sobreviviente fui yo. Solo perdí mis dos piernas y el poder jugar.

Comentarios